Las cuevas de Piusa son un conjunto único de grutas de arenisca con alturas de hasta diez metros situadas al sudeste de Estonia, a pocos kilómetros de la frontera rusa. Las cuevas son un vestigio de la extracción de arena de cuarzo que se llevó a cabo entre 1922 y 1966. Se trata de un sistema de galerías subterráneas con columnas de arenisca y techos abovedados. Las cuevas se cerraron al publico en 2006 por motivos de seguridad. En la actualidad tan sólo se puede visitar una pequeña parte que se encuentra asegurada. La empresa 3D Technologies R&D ha escaneado las cuevas y, sirviéndose de la moderna tecnología interactiva disponible en el centro de visitantes, ha creado cuevas virtuales.